¿Es el financiamiento público la solución para las startups?

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¿Es el financiamiento público la solución para las startups?

Desde que comenzaron a cambiar los intereses de los clientes en los beneficios esperados al recibir un producto o servicio, se debió cambiar la propuesta de valor inicial de las empresas y se comenzó a hablar de las startups. Justamente estos eran los participantes del mercado que se adaptaban a entregar nuevas soluciones a segmentos mucho más pequeños a industrias que estaban en fases de madurez o declive.

Las startups son empresas en fase inicial con un potencial de crecimiento muy grande.
Las industrias nuevamente se están transformado y se genera el dinamismo para la creación de nuevas soluciones que se adapten al consumidor.

Pero y ¿cómo entran al mercado estos actores?

Capital propio, endeudamiento, crowfunding, inversionistas, financiamiento público, etc.

Lo cierto es que dependiendo de donde nos encontremos las posibilidades son variadas: 
  • En Brasil por ejemplo el 66% de las empresas jóvenes se financian con recursos propios de los emprendedores, mientras que el 13% recibe fondos de inversores ángeles, por tanto en mucho menor medida el estado interviene con fondos para el levantamiento de iniciativas de startups.
  • En Ecuador en tanto el sistema de financiamiento para MYPES a nivel general alcanza un 92% en el sistema de endeudamiento privado, mientras que un 8% por financiamiento público. 
  • En Perú la primera generación de startups apoyadas por el estado fue en 2014 y desde ahí han nacido variadas iniciativas que hoy son potentes ejemplos de éxito por su escalamiento en pocos años (crehana, joinnus, turismoi, etc).
  • En Chile el 22,2% del PIB se obtiene de la economía digital, es por esto que el estado realiza esfuerzos año a año para que convocatorias de innovación y levantamiento de capital se centren en esas áreas.

Entonces, ¿es una buena oportunidad el financiamiento público para las startups?

Con estos datos y ejemplos de distintos países esperemos se fomente más aún el gasto público para el ingreso de nuevos y potenciales emprendimientos en la industria digital por supuesto, ¿es una buena opción? Siempre lo es, lo crítico es justamente no generar endeudamiento cuando se comienza y solamente existe el mock-up, se cuenta con el prototipo o recién se está entrando al mercado.